Los ataques aéreos israelíes en Gaza y Líbano mataron a decenas de personas el domingo, incluidos al menos 20 niños, mientras el régimen israelí intensificaba su genocidio de palestinos y ampliaba su guerra más amplia en Oriente Medio.

Los funcionarios de salud informaron que al menos 30 personas murieron en el norte y centro de Gaza cuando los tanques ingresaron al campo de refugiados de Nuseirat en una nueva incursión. Un informe de Al Jazeera dijo: 'Los funcionarios de salud del Hospital Al-Awda en Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza, dijeron que 20 personas murieron en una serie de ataques aéreos y terrestres durante la noche y el lunes, incluido uno que alcanzó un campamento de tiendas de campaña'.

En un mensaje enviado a Reuters a través de una aplicación de chat, Zaik Mohammad, un residente de 25 años, dijo que los tanques abrieron fuego contra el campamento de Nuseirat sin previo aviso y tomaron a los residentes por sorpresa. Los residentes y las familias desplazadas entraron en pánico. “Algunas personas no pudieron irse y permanecieron atrapadas dentro de sus casas, pidiendo que se les permitiera salir, mientras que otras salieron corriendo con lo que pudieron llevar mientras huían”.

Al Jazeera también informó que cuatro personas murieron en un ataque aéreo israelí en la ciudad norteña de Beit Lahiya, que las fuerzas israelíes han asediado desde el aire y con tanques desde principios de octubre. Otras murieron en un ataque aéreo en la ciudad de Gaza.

Un avión no tripulado israelí disparó contra el Hospital Kamal Adwan en Beit Lahiya, el único centro médico que opera en el norte de Gaza, hiriendo a tres trabajadores médicos. Otras 10 personas murieron en un ataque aéreo el lunes por la noche en un café en Al-Mawasi, un área designada como “zona segura humanitaria” por Israel, cerca de la ciudad de Khan Younis, en el sur de Gaza.

Los funcionarios del Ministerio de Salud informaron que al menos 43.604 palestinos han muerto a manos del ejército israelí desde octubre de 2023, y 102.929 han resultado heridos.

Los ataques del domingo en el Líbano mataron a casi 40 personas, y el ataque aéreo israelí se trasladó al norte del país. Al menos 14 personas murieron en un ataque con misiles contra la ciudad norteña de Ain Yaaqoub, que se encuentra aproximadamente a 6,2 millas de la frontera con Siria.

Al Jazeera informó que es posible que haya habido víctimas sirias en este ataque porque hay muchos refugiados en el norte del Líbano que se han refugiado allí durante años. También había libaneses en Ain Yaaqoub que habían huido allí en busca de seguridad desde los suburbios de Beirut y las áreas del valle de Bekaa que han sido atacadas por los bombardeos israelíes.

Al menos 23 personas murieron en otro ataque a unas nueve millas de la capital, Beirut. El Ministerio de Salud libanés dijo el lunes que al menos 3.243 personas habían muerto en la reciente escalada de violencia por parte de Israel, incluidos al menos 200 niños.

Ha habido numerosos indicios de que el gobierno israelí, al que la administración Biden ha proporcionado armas y fondos para llevar a cabo su limpieza étnica de Gaza, se ha envalentonado aún más para intensificar sus operaciones militares criminales tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024.

El primer ministro Benjamin Netanyahu reveló en un mensaje grabado el domingo que ha hablado con el presidente electo fascista tres veces en los últimos días. A lo largo de la campaña de 2024, Trump le dijo repetidamente a Netanyahu que 'hiciera lo que tuviera que hacer' en Gaza y Líbano, al tiempo que decía al electorado que pondría fin a ambos conflictos.

No cabe duda de que la elección de Donald Trump ha dado a los líderes israelíes un estímulo para abandonar por completo cualquier pretensión de negociaciones de alto el fuego y seguir adelante con el proyecto sionista de expulsar permanentemente a los palestinos de Gaza y el llamado “Plan de los Generales”.

En su primera reunión con funcionarios militares israelíes, el nuevo ministro de Defensa, Israel Katz, dijo que “no habrá ningún alto el fuego” y “ninguna interrupción en los ataques contra Hezbolá” en el Líbano. Katz también publicó una declaración en X que decía: “Irán está más expuesto que nunca a ataques a sus instalaciones nucleares. Tenemos la oportunidad de lograr nuestro objetivo más importante: frustrar y eliminar la amenaza existencial al Estado de Israel”.

El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, hablando con la prensa el lunes antes de la reunión semanal de la facción de su partido Sionismo Religioso en la Knesset, dio la bienvenida a la victoria de Trump y dijo que presenta una “oportunidad importante” para “aplicar la soberanía israelí a los asentamientos en Judea y Samaria”, refiriéndose a las áreas de Cisjordania por sus nombres bíblicos.

Smotrich, que también es ministro del Ministerio de Defensa israelí, se quejó de que la administración Biden había “desafortunadamente decidido intervenir en la democracia israelí y no cooperar conmigo personalmente”.

Se refirió a las medidas adoptadas por la administración Trump entre 2017 y 2021, como el traslado de la embajada de Estados Unidos a Jerusalén, el reconocimiento de los Altos del Golán como territorio israelí y la decisión de declarar que los asentamientos de Israel en Cisjordania son legales según el derecho internacional, como medidas que estaban en línea con su propia agenda política fascista.

El lunes, Donald Trump eligió a la senadora Elise Stefanik, republicana de Nueva York, para ser embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas. Stefanik ha sido una rápida defensora del sionismo y del genocidio de Gaza. Fue una figura destacada en el Congreso que calificó de “antisemitas” a los manifestantes propalestinos en los campus universitarios de todo el país.

La caza de brujas que lleva a cabo Stefanik contra los manifestantes contra el genocidio de Gaza coincide con su eco de la teoría del Gran Reemplazo del antisemitismo real, que afirma que los judíos ricos están diseñando y financiando una migración masiva a los Estados Unidos desde Asia, África y América Latina para reemplazar a la población estadounidense blanca.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 11 de noviembre de 2024)