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Distritos escolares en todo Estados Unidos están despidiendo y amenazando a educadores por realizar comentarios críticos sobre Charlie Kirk, el provocador de extrema derecha recientemente fallecido. Desde su asesinato el 10 de septiembre, al menos 33 educadores en escuelas K-12 y campus universitarios de todo el país han sido despedidos, suspendidos o puestos en licencia administrativa debido a comentarios en redes sociales o declaraciones en el aula sobre su muerte. Cientos más enfrentan investigaciones o procesos disciplinarios pendientes.

La glorificación de Kirk, orquestada por la administración Trump y sus aliados, está siendo utilizada para intensificar la represión, censurar voces críticas y legitimar la ideología de extrema derecha. Esta escalada tiene como objetivo purgar las escuelas de toda oposición, imponer un conformismo ideológico y preparar el camino hacia la dictadura y la guerra imperialista.

El World Socialist Web Site denuncia esta caza de brujas, cuyo objetivo no es solo silenciar a los docentes sino a la clase trabajadora en su conjunto. Es parte del plan de Trump para instaurar una dictadura, que también contempla el despliegue de la Guardia Nacional en las principales ciudades de EE.UU. por orden de ejecutivos corporativos. También es parte del ataque nacional contra la educación pública, con casi todos los principales distritos escolares enfrentando enormes déficits presupuestarios y Trump amenazando con cerrar el Departamento de Educación.

Hacemos un llamado a una campaña nacional de defensa, centrada en la clase trabajadora, para responder al intento de prohibir cualquier crítica contra la extrema derecha.

La represión se extiende por más de un tercio de los estados del país, incluyendo California, Florida, Idaho, Iowa, Maryland, Massachusetts, Míchigan, Nueva York, Carolina del Norte, Ohio, Oklahoma, Oregón, Pensilvania, Carolina del Sur, Texas, Tennessee, Virginia y Washington. Estas cifras seguirán en aumento conforme las campañas de extrema derecha en línea y los funcionarios estatales intensifiquen la caza de brujas, doxxing (exponiendo públicamente) a miles de maestros y obreros y sujetándolos a más acoso.

Superintendentes estatales y otros funcionarios políticos afines a la agenda de represión masiva de Trump han emitido declaraciones atacando los derechos de la Primera Enmienda de los educadores.

• Florida: El comisionado de Educación Anastasios Kamoutsas emitió un memorándum advirtiendo a todos los docentes que comentarios “despreciables” sobre Kirk podrían derivar en investigaciones inmediatas y la posible revocación de licencias docentes. Al menos ocho educadores están bajo revisión, y varios ya han sido suspendidos o reasignados en distintos condados. El gobernador Ron DeSantis amplificó la ofensiva, insistiendo en que la disciplina docente es “necesaria” ante cualquier negativa a llorar a Kirk y felicitó a Kamoutsas por “garantizar la rendición de cuentas”.
• Oklahoma: El fascista superintendente estatal Ryan Walters declaró que cualquier docente que “glorifique” la muerte de Kirk será vetado de por vida del salón de clases. Al menos cuatro están bajo investigación. El estado está utilizando el sistema de reportes “Awareity Reporting System” del Departamento de Educación, alentando activamente al público a denunciar y exponer a educadores por publicaciones críticas hacia Kirk o la agenda de extrema derecha.
  Esta escalada intensifica condiciones ya marcadas por políticas macartistas en curso, como la reciente implementación de la prueba de lealtad ideológica “ America First ” para la certificación de docentes que se trasladan a Oklahoma desde California o Nueva York. Walters justificó públicamente esta medida como una forma de proteger a las escuelas del “radicalismo izquierdista” y promueve a Oklahoma como modelo nacional de imposición ideológica, mandatos bíblicos e imposiciones curriculares.
• Texas: La Agencia de Educación de Texas (TEA, por sus siglas en inglés) ordenó a todos los superintendentes informar sobre educadores que hayan hecho comentarios “reprochables” o “inapropiados” sobre el asesinato de Kirk, lanzando una investigación estatal a través de un portal en línea especial. Hasta la fecha, existen al menos 180 denuncias en revisión contra docentes y personal escolar de Texas, con múltiples despidos ya confirmados en varios distritos. Los representantes estatales Briscoe Cain y Hillary Hickland han exigido el despido de docentes que hayan criticado a Kirk en redes sociales, alimentando aún más el clima de caza de brujas.
• Virginia: La superintendente Emily Anne Gullickson ordenó a los distritos investigar y sancionar a quienes hicieran comentarios “inaceptables” sobre la muerte de Kirk, lo que ha llevado a la suspensión de al menos cuatro docentes en escuelas públicas, con investigaciones extendiéndose por los campus. También el profesorado en instituciones de educación superior enfrenta sanciones disciplinarias formales, alentadas por grupos derechistas dentro de los campus.

Pocas horas después del asesinato de Kirk, redes ultras en línea lanzaron una campaña coordinada de exposición pública de cualquier educador, trabajador o estudiante que no lo hubiera llorado o que hubiera publicado críticas al respecto. La leal trumpista y teórica conspirativa Laura Loomer amenazó con destruir la carrera de aquellos “lo suficientemente enfermos como para celebrar su muerte”, mientras que el activista republicano Scott Presler movilizó a sus seguidores para identificar y avergonzar públicamente a los docentes.

El sitio web anónimo “Expose Charlie’s Murderers” publica información sobre más de 50.000 personas que han realizado comentarios críticos sobre Kirk. Se incluye sus nombres, ubicaciones y empleadores, con el objetivo de que sean despedidos o algo peor. La cuenta “Libs of TikTok” difunde datos personales de educadores, profesores y trabajadores de la salud, exigiendo despidos masivos y llamando a “demoler” la educación pública, con un mensaje que insta a los padres a educar en casa como forma de protesta.

“También están atacando a docentes universitarios: los están bombardeando con amenazas y demandas de despido por simplemente comentar algo sobre Charlie Kirk”, dijo un empleado de una universidad californiana, quien fue doxeado la semana pasada, al World Socialist Web Site. “Después de que se difundió mi publicación, comencé a recibir una avalancha de mensajes hostiles, enlaces a publicaciones de la derecha y eventualmente tuve que bloquearlos. Luego recibí un mensaje de voz de alguien que decía ser policía estatal exigiendo una devolución de llamada. No pensé que los policías hicieran eso. Todo parecía una táctica de intimidación. Enviaron un correo a decenas de docentes adjuntando capturas de pantalla de supuestas publicaciones. Personas inocentes están siendo acosadas simplemente por lo que dicen en línea”.

Una docente de secundaria en Virginia dijo: “Silenciar a los educadores por desafiar narrativas dañinas es un ataque a la libertad de expresión, a la integridad académica y a la democracia misma. Ningún maestro debería enfrentar represalias por oponerse a la glorificación de figuras opresivas. Exigimos su reintegración inmediata y un compromiso firme con la defensa de la voz y los valores de los educadores”.

La respuesta de la burocracia sindical docente ha sido de abierta colaboración. El presidente de la Asociación de Educación de Florida (FEA), Andrew Spar, emitió declaraciones vagas sobre construir “comunidades más fuertes y seguras” sin mencionar a Kirk, Kamoutsas ni denunciar la caza de brujas. En lugar de organizar una defensa activa, insistió en que los sindicatos deben “unirse, no dividirse” ante los ataques a educadores individuales. En Texas, el presidente estatal de la Federación Estadounidense de Docentes (AFT), Zeph Capo, condenó la “caza de brujas política” pero no ofreció ninguna protección concreta ni movilización, simplemente exhortó a los distritos a “revisar instituciones independientes” mientras la purga se intensifica.

A nivel nacional, la presidenta de la AFT, Randi Weingarten, y la presidenta de la Asociación Nacional de Educación (NEA), Becky Pringle, no han realizado ninguna defensa pública de los docentes. Ellas mismas son figuras de alto rango en la jerarquía del Partido Demócrata y repiten sus hipócritas condenas a la “violencia política” mientras legitiman la ofensiva reaccionaria en curso.

Durante el fin de semana, Weingarten eliminó una publicación de Jeannie Rider en X que intentaba distinguir entre las protestas estudiantiles contra la aparición de Kirk en la Universidad del Valle de Utah y las acciones del tirador. “La he borrado porque algunos de la derecha pensaron que era una operación de falsa bandera”, afirmó. “Les escucho; quiero ser receptiva, así que eliminé la publicación. La violencia política debe ser condenada y todos debemos desescalar”.

La carrera de Kirk debe entenderse por lo que fue: como director de Turning Point USA (TPUSA), jugó un papel central en la organización de redes extremistas en campus universitarios, promoviendo el nacionalismo cristiano, respaldando la teoría antisemita y neonazi del “Gran Reemplazo” y dirigiendo campañas de odio contra inmigrantes, educadores, académicos y jóvenes de izquierda. Fue un ideólogo clave del movimiento fascista de Trump, defendiendo la represión directa contra todos los supuestos enemigos, incluso apoyando medidas de estado policial y el genocidio en Gaza.

Hoy, la administración Trump y TPUSA siguen adelante con su campaña para transformar escuelas y universidades en bastiones de ideología reaccionaria y reclutamiento fascistoide.

Esta campaña de intimidación debe ser respondida con el desarrollo de un movimiento dentro de la clase trabajadora en defensa de los derechos democráticos. Independiente de ambos partidos, la forma organizativa de dicha campaña debe ser una red nacional e internacional de comités de base. Esta es la Alianza Internacional Obrera de Comités de Base (AIO-CB).

Solo mediante la autoorganización de educadores, estudiantes y trabajadores en cada escuela, universidad y centro de trabajo—libres de la burocracia sindical y el control de los partidos corporativos—podrá la clase trabajadora montar una resistencia unificada capaz de defender la libertad de expresión y derrotar al fascismo y la dictadura.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 16 de septiembre de 2025)